Una obra artística

Raise my sins es una obra artística.
Raise my sins es una experiencia artística viva — una obra invisible, creada por miles de almas anónimas a través de un gesto simple : el perdón.

Una creación colectiva, porque cada persona deja aquí una parte de sí misma.
Cada mensaje se convierte en un color en la paleta común, un fragmento de emociones compartidas.
Juntos forman una sola voz, un aliento colectivo.
La humanidad se reúne — sin juicio — para crear sentido.

Un proyecto existencialista, porque el gesto y la acción cuestionan el ser.
Perdonarse a uno mismo es afirmar la libertad de existir de otra manera.
Es un acto consciente, simple y profundo, que devuelve sentido a la elección individual.
Es una invitación a reflexionar sobre la condición humana.

Humanista, porque une en lugar de dividir.
Raise my sins reúne las diferencias en una misma compasión.
No hace falta conocerse para comprenderse : el perdón habla a todos.
Es una mano tendida hacia el otro, un reconocimiento universal de la fragilidad humana — y de la propia.

Surrealista, finalmente, porque aquí todo es real e irreal al mismo tiempo.
El sitio se convierte en una escena poética donde la emoción toma forma en el vacío.
La ausencia de sentido se convierte en el propio sentido : un espacio donde respira el alma.
Un ritual sutil y bello, donde la nada se convierte en el todo.

Raise my sins inventa la máquina del perdón.